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Tom Cruise fue considerado un sex symbol en la década de los 90 y ha sido señalado como uno de los actores más guapos de Hollywood, pero al parecer todo eso ha quedado atrás.
Cruise fue uno de los protagonistas de la 69 edición de los Premios BAFTA, donde entregó el galardón al la cinta “El Renacido”, la cual logró cinco premios.
Durante esta ceremonia, lo que más llamó la atención fue el renovado aspecto de protagonista de “Misión Imposible”. Cruise sorprendió con un cambio de imagen al estilo Renée Zellweger, con un rostro particularmente hinchado que más que producto de un aumento de peso parece ser culpa del bótox.
Tom tiene 53 años y siempre se ha mostrado muy cuidadoso con su imagen. Se mantiene muy en forma y cuando posa ante las cámaras siempre cuida su ángulo, también recurre a las gafas de sol cuando no cree tener un buen día para posar ante los medios.
Pero en esta ocasión no ocurrió así y no mostró su mejor rostro.
