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La muerte de un hombre afroamericano, identificado como Alton Sterling, a manos de la policía de Baton Rouge, Luisiana, ha desatado una ola de protestas en Estados Unidos.
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El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, informó que el asesinato de Sterling será objeto de investigación. “Tenemos plena confianza de que este asunto será investigado plena, imparcial y profesionalmente, y voy a exigir que sea conducido de esa manera“, dijo Edwards en una rueda de prensa.
Tras el anunció, los deudos realizaron una vigilia afuera de la tienda donde fue abatida la víctima.
La muerte de Sterling, quien vendía discos compactos afuera de la tienda con el permiso del propietario del negocio, es el último de una serie de casos de brutalidad policial con implicaciones racistas en Estados Unidos.
Un video grabado por testigos muestra a un oficial corriendo tras un hombre afroamericano. Momentos después, otro agente ayuda a sujetarlo en el suelo y luego le disparara a quemarropa cuatro veces.
“¿Le dispararon? ¡Oh, Dios mío!“, dice uno de los testigos en la grabación.
De acuerdo con los “procedimientos establecidos”, los dos oficiales implicados en el tiroteo quedaron en licencia administrativa mientras se desarrolla la investigación.
