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En este especial te presentamos a cinco guatemaltecos que, seguramente, conoces por sus profesiones, y te presentamos su lado paterno con los retos más importantes como papás y cómo sueñan ver a sus pequeños en el futuro.
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MIGUEL ÁNGEL GÁLVEZ
Para el juez Miguel Ángel Gálvez, quien ha ganado popularidad por llevar unos de los casos judiciales más impactantes de los últimos años en Guatemala, el Día del padre es una fecha inolvidable. Gálvez piensa que es una fecha perfecta para pensar en la educación y el cariño que se les da a los niños, ya que son el futuro del país. “Prácticamente nos representarán algún día y creo que ese tema se ha descuidado últimamente”, comenta. El juez aprovechó para enviar un saludo por esta celebración: “Felicitaciones a todos los padres, especialmente a los del Organismo Judicial de Guatemala. Tratemos de buscarle un mejor el futuro a los niños del país”.
“Cuando bañaba a mi hijo de pequeño, me preguntaba por qué yo tenía el pelo blanco, y le respondía que era por un shampú que usaba. A veces se ponía a llorar porque pensaba que iba a aplicárselo por error”.
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FRANCIS DÁVILA
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Es común ver al DJ guatemalteco Francis Dávila llegar a entrevistas y a algunos conciertos con sus hijos gemelos, quienes también son muy conocidos porque el artista publica en sus redes sociales varias de sus vivencias como padre. Desde el momento en que tomó la decisión de ser papás, Francis supo que su vida había cambiado y que tenía que cuidar su vida para estar presente para alguien más. La actividad que más les gusta hacer es escuchar música y sus intérpretes favoritos son Queen y The Beatles. “Son superfanáticos de estas bandas”, comenta Francis. “Reconocen sus canciones en cualquier lugar donde estemos”, agrega.
“Ver a mis hijos de bebés y notar su belleza comenzó a sacar un lado sensible de mí, que siempre había estado ahí, pero dormido. Me di cuenta de que era capaz de sentir muchas cosas que no se pueden describir”.
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EMILIO MÉNDEZ
Además de ser uno de los emprendedores más exitosos del país, Emilio Méndez es un defensor público de derechos humanos. Su trabajo forma parte de su vida y no separa su vida en el trabajo y con la familia. El reto más grande que ha vivido como papá es buscar que sus hijas logren sacar la mejor versión de ellas mismas, y eso significa aceptar a cada una como es, sin imponer o proyectar lo que él nunca pudo hacer. “Si logro que ellas encuentren lo que la naturaleza les dicte, creo que tendrán mucho ganado, porque en la medida en que sean ellas mismas, serán más libres y talentosas porque harán lo que les gusta”, expresa. La actividad favorita de ellos es comer juntos. “Tengo el lujo y privilegio de poder almorzar con mis hijas, esa es una de nuestras actividades favoritas”, añade.
“Como papá, lo más gratificante que he vivido es cuando las niñas están lejos y uno se entera por terceras personas que ellas tienen una buena educación y un gran corazón”.
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JOSÉ GONZÁLEZ-CAMPO
Para el empresario José González-Campo, manejar el tiempo entre el trabajo y la familia ha sido uno de los retos más difíciles para todo padre y lo que no se debe perder nunca, aunque es difícil hacerlo, es tener claro que la prioridad número uno es la familia. “El trabajo es un medio para ganarse la vida, pero la familia debe ser siempre la prioridad”, afirma. En lo personal, el reto más importante que ha vivido como papá es reflexionar en que nadie entrena a las personas para ser papás. “Entonces, mal que bien, uno se va entrenando o formando en el camino, y al final, eso implica un reto enorme. Se trata de cumplir de la mejor forma con la mayor responsabilidad que se tiene en la vida, que es criar a los hijos y llevarlos a ser gente de bien”, añade.
“Ver a mis hijos nacer ha sido lo más gratificante que he vivido como papá. Me gustaría ver a mis hijos en el futuro siendo mejores personas de lo que he podido ser y viviendo en un mejor país que el que tenemos hoy”.
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AMADO GARCÍA
La carrera de la vida ha sido de grandes sacrificios para José Amado García, quien en los últimos 15 años se ha hecho un nombre como uno de los mejores exponentes del atletismo guatemalteco y cuyo esfuerzo se ha traducido en importantes triunfos como en el Maratón de Miami, Estados Unidos, en 2008, las medallas de oro en los Juegos Centroamericanos de San José 2013 y Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014, de plata en los Panamericanos de Rio 2007 y tres participaciones en los Juegos Olímpicos: Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y ahora se entrena para asistir a Rio 2016.
En los últimos años su constante recorrido en el extranjero en competencias y en campamentos de entrenamiento le ha impedido estar en casa cerca de sus tres hijos, pero los dos mayores: Jefferson y Ayleen, comprenden que su papá se emplea a fondo sobre el asfalto y se enorgullecen cada vez que cruza la meta.
“Es difícil por mis entrenamientos y competencias estar cerca de ellos, pero cada vez que estamos juntos vivimos muchos momentos felices que nos ayudan a soportar el tiempo que estamos lejos”.
