Una fotografía de los Juegos Olímpicos en París 2024 ha causado sensación en redes sociales, pues es tan precisa que algunos se confundieron y pensaron que había sido manipulada digitalmente.
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Su origen no está en la Ciudad de la Luz, París sino a unos 16.000 kilómetros de distancia, en las aguas cristalinas de Tahití. El protagonista: Gabriel Medina, surfista brasileño de renombre mundial, quien no solo conquistó las olas de Teahupo’o con un puntaje casi perfecto, sino que también se inmortalizó en una impresionante imagen.
En su participación,Medina se adentró a las aguas, hizo lo que sabe hacer con propiedad. Se deslizó por una ola atronadora, emergió y se elevó por los aires en una celebración que pareció desafiar la gravedad. El fotógrafo Jérôme Brouillet, de la Agence France-Presse, capturó el momento preciso: Medina, en una pose serena, señalando al cielo mientras su tabla reflejaba perfectamente sus movimientos, todo ello sobre un fondo de nubes del Pacífico.
Inicialmente sospecharon de manipulación digital, incluso con la ayuda de inteligencia artificial (IA). Sin embargo, el fotógrafo asegura que fue producto de la anticipación, el conocimiento del estilo del surfista y un poco de suerte.
“No fue difícil hacer la foto. Se trataba más bien de anticipar el momento”, explicó el fotógrafo a The Guardian, quien admite haberse sorprendido por la repercusión de su trabajo. “Las condiciones eran perfectas, las olas más altas de lo que esperábamos”, agregó.
Brouillet, quien se mudó a Tahití hace una década desde Marsella, ha estado preparando la cobertura de los Juegos de París. Aunque también es surfista, admite que las olas de Teahupo’o son demasiado peligrosas para él. Prefiere estar en el barco de los medios, confiando en su cámara para capturar el espíritu de los Juegos Olímpicos, añadió en la entrevista.