Una de cal y otra de arena. Así ha sido el juego del francés Kylian Mbappé que estuvo a punto de ser expulsado en el juego de su equipo el Real Madrid que derrotó 3-0 al Girona. El delantero anotó un gol, pero en una jugada se salvó de ser expulsado al arrebater el balón con la mano y avanzar hacia el portero pero al rematar la falló.
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El francés al fin volvió a su remate de pierna derecha para anotar y agradar a las gradas, como en sus mejores tiempos. Un potente derechazo para gol. Mbappé no atraviesa su mejor momento, pero es lo que hizo esta noche en Montilivi en su mano a mano ante Gazzaniga.
Así fue la jugada
A pesar de que la jugada no valía porque el francés se había ayudado de la mano derecha para llevarse el balón y quedarse solo delante del meta. Sin embargo, el madridista condujo completamente solo unos 20 metros hasta llegar a zona de remate y, al definir, la envió fuera con toda la portería de frente.
