El encanto de las geishas y maikos, emblemas vivientes de la tradición japonesa, se ve empañado por el acoso turístico que enfrentan en las calles de Gion, el distrito histórico de Kioto. Estas mujeres, dedicadas a las artes tradicionales japonesas como el canto, la danza y la música, a menudo se encuentran en el centro de la atención no deseada de los visitantes ávidos por captar la esencia de la cultura japonesa en sus fotografías.
El fenómeno de los “paparazzi de geishas” ha llevado a situaciones incómodas y, en algunos casos, francamente irrespetuosas. Los turistas, deslumbrados por la exótica belleza y elegancia de estas mujeres, a menudo cruzan los límites al perseguirlas con cámaras y teléfonos inteligentes, intentando capturar imágenes sin su consentimiento y perturbando su vida diaria.
Geishas son acosadas en Japón y la situación preocupada a las autoridades
El Consejo del Distrito Sur de Gion ha tomado medidas para abordar este problema, incluida la colocación de carteles que prohíben tomar fotografías de las geishas sin permiso y la imposición de multas a los infractores. Sin embargo, el acoso persiste, y los lugareños se enfrentan al desafío de proteger la privacidad y el bienestar de estas mujeres.
Las geishas y maikos merecen ser tratadas con respeto y consideración, y es responsabilidad de los visitantes comprender y respetar las normas y costumbres locales. El acoso y la intrusión no solo son una falta de respeto hacia estas mujeres, sino que también socavan la rica herencia cultural que representan.
Para abordar este problema de manera más efectiva, se están considerando medidas adicionales, como requerir que los turistas que visiten el vecindario estén acompañados por un guía turístico japonés que pueda educarlos sobre cómo comportarse adecuadamente.
Los turistas deberán tener más cuidado con las geishas a la hora de visitar Kioto
Además, se están explorando opciones para proporcionar oportunidades de interacción controlada con las geishas, como espectáculos de baile tradicional y eventos culturales, donde los visitantes puedan disfrutar de su arte de manera respetuosa y sin intrusión.
Es fundamental que se preserve el legado y la integridad de las geishas y maikos, quienes desempeñan un papel invaluable en la promoción y preservación de la cultura japonesa. A través del respeto mutuo y la comprensión, podemos garantizar que estas mujeres continúen siendo apreciadas y admiradas.