Jennifer Lopez, la icónica actriz y cantante, es conocida tanto por su talento multifacético como por su impresionante colección de anillos de compromiso. A lo largo de los años, la “Diva del Bronx” ha recibido seis anillos de compromiso que no solo han sido hermosos, sino también extraordinarios en valor y diseño, cada uno simbolizando un capítulo diferente en su vida amorosa.
1. Ojani Noa (1997):
El primer anillo de compromiso de Jennifer Lopez llegó de la mano del empresario cubano Ojani Noa, con quien se casó en 1997. Este anillo, valorado en $100.000, fue un diamante clásico, reflejando el inicio de su camino hacia la fama. Aunque su matrimonio solo duró un año, el anillo marcó el comienzo de una serie de compromisos notables.
2. Cris Judd (2001):
En 2001, Lopez se comprometió con su entonces bailarín de respaldo, Cris Judd. Esta vez, recibió un anillo con un diamante de corte esmeralda, valorado en seis cifras. Su matrimonio, aunque breve, dejó una huella en la vida de la cantante, mostrando su preferencia por joyas de gran elegancia.
3. Ben Affleck (2002):
En el primer compromiso con el actor, recibió un diamante Harry Winston rosa de 6,10 quilates.
4. Marc Anthony (2004):
Tras su ruptura con Affleck, Lopez comenzó una relación con el cantante Marc Anthony, quien le propuso matrimonio con un diamante azulado de 8.5 quilates de Harry Winston. Se casaron en 2004 y su unión duró hasta 2011. Este anillo, con su llamativo color, fue otro ejemplo del gusto de Lopez por las joyas únicas y lujosas.
5. Alex Rodriguez (2019):
En 2019, Alex Rodriguez le propuso matrimonio a Lopez con un impresionante diamante de corte esmeralda de entre 10 y 15 quilates, valorado entre $1 y $5 millones. Aunque su compromiso terminó en 2021, este anillo sigue siendo uno de los más deslumbrantes en la colección de la cantante.
6. Ben Affleck (2022):
En 2022, tras retomar su relación con Ben Affleck, Lopez anunció su segundo compromiso con el actor, esta vez con un raro diamante verde, su color de la suerte. Este anillo, más raro y significativo que el primero, es una joya que refleja no solo su amor renovado, sino también su evolución personal.