Hablamos con Santiago Maza, director del documental que se puede ver en Netflix: Estado de Silencio. El director mexicano llegó a Valladolid (España) presentando su film en el festival de Seminci, donde abordamos temas cruciales sobre el periodismo en México, los riesgos que enfrentan los periodistas y el rol de los medios de comunicación. Maza, integrante junto a Gael García Bernal y Diego Luna de la productora La Corriente del Golfo, habló sobre la violencia que afecta a los comunicadores y la responsabilidad de los medios, mientras su documental busca concienciar sobre estos temas.
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Al preguntarle sobre las amenazas que enfrentan los periodistas, Maza fue claro: “Al matar a un periodista, se mata el derecho de la sociedad a estar informada. Hay que decirlo una y otra vez”. La conversación giró en torno a cómo los reporteros viven bajo constantes peligros por su labor. Durante el rodaje, mencionó que su equipo estuvo en zonas de riesgo: “Estuvimos en zonas muy volátiles. El estar ahí con la cámara, naturalmente, incomoda a la gente”, aunque, afortunadamente, no enfrentaron incidentes graves.
Maza también resaltó la diferencia entre cineastas y periodistas: “Nosotros nos vamos. No vivimos ahí. Jesús (uno de los periodistas en el documental) se queda, y él sí lo ubica”. Este comentario subraya la vulnerabilidad de los periodistas locales, que permanecen expuestos al peligro incluso después de que las cámaras se apagan.
“Aprendes a vivir con ciertas medidas: no manejar carreteras a ciertas horas... cosas que de alguna manera te mantienen con vida”
— Santiago Maza, sobre el impacto del miedo en la vida cotidiana de los periodistas
Sobre el impacto del miedo en la vida cotidiana de los periodistas, Maza señaló: “Aprendes a vivir con ciertas medidas: no manejar carreteras a ciertas horas... cosas que de alguna manera te mantienen con vida”. Estas medidas, aunque necesarias para su seguridad, reflejan la precaria situación de la libertad de prensa en México.
Acerca del papel de algunos medios, Maza se mostró crítico: “Yo le llamaría un falso periodismo que es muy servicial, puede ser al servicio del gobierno o de una empresa”. Denunció que algunos prefieren evitar la verdad para no exponerse, aunque reconoció que todavía hay periodistas comprometidos con la verdad: “Carmen Aristegui hace un trabajo increíble, y también me parece admirable lo que hace John Gibler”. Maza destacó cómo periodistas como Marcos Vizcarra logran mantenerse fieles a su labor, aun cuando algunos de los medios para los que trabajan puedan tener intereses que limiten la publicación de ciertas noticias.
Maza también expresó su decepción con algunos medios, como El País en España, del cual en conversaciones con compañeros españoles se llegó a la conclusión de que: “El País ha perdido eso que era… ese filo que tenían”, aunque sigue siendo influyente en México.
Finalmente, discutimos el uso del humor para tratar temas serios. Sobre figuras como Chumel Torres y Brozo, comentó: “El humor bien llevado puede despertar una conciencia crítica. No creo que haya que tener un tono en particular para tocar ningún tema”. Defendió que cada quien puede abordar los problemas desde su propia perspectiva, siempre que lo haga con responsabilidad.
Santiago Maza dejó claro su respeto por los periodistas y su compromiso con visibilizar los desafíos que enfrentan a través de Estado de Silencio. Como dijo: “Son los altavoces de la verdad”.