El Real Madrid sigue con paso firme en su camino hacia la "Duodécima" y este miércoles dio un golpe de autoridad en el Santiago Bernabéu frente un incómodo rival.
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Los blancos recibían a un aguerrido Nápoli, dirigido por Maurizio Sarri, que llegaba con una idea clara: desactivar el mediocampo rival y responder con el juego rápido que los ha caracterizado en la Serie A, donde actualmente ocupan la tercera plaza.
La propuesta funcionó en los primeros minutos y la velocidad de sus delanteros puso en ventaja a los napolitanos apenas al minuto 7 con un gol de Lorenzo Insigne. El italiano sorprendió a un descolocado Keylor Navas que nada pudo hacer para detener el disparo medido.
El Real Madrid soportó el golpe y se mantuvo ordenado, presionando las líneas y generando centros para meter a los visitantes en su área. Allí encontró la clave para el empate gracias a un centro perfecto de Daniel Carvajal desde la derecha, que culminó con un cabezazo de Karim Benzema. Era el 1-1 y los equipos se iban al descanso.
Ya en el segundo tiempo, el Nápoli perdió el balón y las individualidades del Madrid pesaron más.
Al minuto 49, una gran jugada de Cristiano Ronaldo dentro del área llegó a los pies de Toni Kroos, quien definió con mucha calidad hacia el poste izquierdo de Pepe Reina.
Apenas cinco minutos después, el brasileño Casemiro aprovechó un rechazo de la defensa napolitana y clavó un sendo golazo con una volea desde afuera del área, poniendo el 3-1 final.
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La vuelta de la eliminatoria se jugará el próximo 7 de marzo en el estadio San Paolo, en Italia, donde el Nápoli llegará con la obligación de remontar si quiere avanzar a los cuartos de final de la máxima competición de clubes de Europa.
