Contra todo pronóstico, el Barcelona le dio vuelta a la goleada que se llevó hace tres semanas del Parque de los Príncipes y avanzó a los cuartos de final de la Champions League completando una remontada histórica.
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Los azulgranas tenían claro su objetivo e iniciaron el partido prácticamente en ventaja, gracias a un gol de Luis Suárez apenas a los 2 minutos del primer tiempo.
Lo siguiente fue un monólogo del Barcelona, que atacó a un endeble PSG que salió confundido a la cancha. Al minuto 39, un autogol de Kurzawa ponía el partido 2-0 y aumentaba las esperanzas de la remontada.
Los equipos se fueron al descanso pero los catalanes nunca quitaron el pie del acelerador.
Ya en el segundo tiempo, Lionel Messi puso el 3-0 desde el punto penal, tras una dudosa decisión arbitral.
En el minuto 61, Cavani descontaba para los franceses y ponía el marcador 3-1, tirando prácticamente cualquier posibilidad de remontada.
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Sin embargo, los de Unai Emery se confiaron y no supieron aguantar la embestida blaugrana.
Cuando el partido llegaba a su ocaso, Neymar anotó un golazo de tiro libre (87). Al Barcelona aún le faltaban dos goles.
Dos minutos después, el árbitro señalaba una nueva pena máxima a favor de los locales, tras, de nuevo, una falta poco clara en el área.
Neymar no perdonó y puso el partido 5-5. Pero el empate (global) no le bastaba a los de Luis Enrique, pues el gol del PSG hacía avanzar a los franceses por la ventaja de visitante.
Se cumplió el minuto 90 y el árbitro adicionó 5 minutos más. Todo el Barcelona se alojó en el área del Paris en busca de la hombrada. Y la conseguiría.
Sergi Roberto sería el autor de la histórica hazaña, tras un centro al área que anticipó a Trapp. El Barcelona conseguía el 6-1. Un resultado imposible, que los hizo avanzar a los cuartos de final.