El desfile de celebración, previsto para el domingo en Londres, fue cancelado de forma oficial por el Chelsea ante los lamentables acontecimientos del lunes en Mánchester, donde murieron 22 personas y otras 59 resultaron heridas.
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"A la luz de estos hechos trágicos, creemos que sería inapropiado seguir adelante con el desfile de celebración en Londres (…) Ante la amenaza a la seguridad anunciada por el Gobierno, y reconociendo que se trata de una situación en desarrollo, hemos considerado cuidadosamente esta situación. Creemos firmemente, en interés de todos, que esto es lo correcto. Estamos seguros de que nuestros fanáticos entenderán esta decisión", escribió el club.
"Por último, en señal de respeto, nuestros jugadores usarán una banda negra en el brazo en la final de la FA Cup contra el Arsenal, el sábado. El Chelsea, además, hará una donación a un fondo de apoyo para las víctimas de este horrible ataque", agregó.
El club londinense guardó un minuto de silencio en el entrenamiento del martes.
El gobierno británico activó el martes el nivel máximo de alerta terrorista y reforzó la seguridad en las calles ante la amenaza de un nuevo atentado.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque indicando que “uno de los soldados del califato colocó bombas entre la muchedumbre” durante el concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande.
Los extremistas también amenazaron con realizar otros ataques.