Renovado en la presidencia del Real Madrid el lunes, Florentino Pérez debe dedicarse a la tarea de retener a Cristiano Ronaldo, en medio de un mar de rumores sobre la salida del cuádruple Balón de Oro portugués.
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"No habiéndose presentado más que una candidatura (…) se proclama Presidente del Real Madrid a Florentino Pérez Rodríguez", anunció el club merengue en su página web la madrugada de este lunes.
La proclamación de su nuevo mandato luego de 15 años (2000-2006 y desde 2009) al frente del campeón de Europa tendrá lugar en una ceremonia en el estadio Santiago Bernabéu.
El nuevo periodo de Pérez, comienza con un tema al rojo vivo: las amenazas de salida de su atacante estrella, Cristiano Ronaldo, tras ocho años en el Real Madrid.
Actualmente en Rusia para participar en la Copa de las Confederaciones con la selección portuguesa, CR7 habría dicho a sus compañeros de selección, según el diario deportivo español Marca: "Me voy del Madrid, no hay marcha atrás".
El periódico portugués A Bola aseguró que Florentino Pérez ya habría sido puesto al corriente de la decisión.
Los rumores estallaron poco después del anuncio de una investigación de la fiscalía española ante la posibilidad de que Ronaldo cometiera un fraude fiscal por un monto de 14,7 millones de euros, lo que habría irritado al jugador.
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Presión
Los comentaristas deportivos españoles no descartan que Cristiano busque hacer presión sobre el Real Madrid para que asuma una parte de una eventual multa, como hizo el FC Barcelona con Lionel Messi.
Pero el silencio de Ronaldo, que desde el viernes no ha dicho nada y, peor aún, no ha emitido un desmentido, inquieta a sus seguidores.
Florentino Pérez tiene previsto dar una entrevista en la radio y se espera que hable de Ronaldo, a quien él mismo hizo venir al conjunto merengue en 2009 procedente del Manchester United.
En ese momento, el traspaso del joven portugués de 23 años ya premiado con un primer Balón de Oro se convirtió en el más caro de la historia, por 94 millones de euros.
El efecto de una bomba
Ocho años más tarde y con otros tres Balones de Oro a cuestas, Ronaldo sería codiciado entre otros equipos por los "Red Devils", dispuestos a pagar hasta 200 millones de euros para recuperarlo.
Sin olvidar una cláusula de rescisión estimada por la prensa en 1,000 millones de euros si muchos clubes se presentan.