Los padres se convierten en los guías de los hijos, quienes conforme pasan los años van tomado el ejemplo y buscan imitarlos y sueñan ser como ellos.
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Eso ha hecho Amílcar, un joven emprendedor, amante del ciclismo tal cual lo ha sido siempre su padre Alberto Fermín Méndez, último guatemalteco ganador a una Vuelta a Guatemala.
Llevar el apellido de un campeón e insignia del ciclismo no es presión para él, todo lo contrario, es una motivación para buscar obtener los logros que su papá alcanzó.
“Mi papá siempre ha sido mi inspiración, el gusto por el ciclismo viene desde mi abuelo quien nos lo heredó. Trabajo fuerte, así me lo ha enseñado él y sueño un día poder triunfar como él lo hizo en su momento”, dijo Amílcar.
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Actualmente corre para el equipo Intercop de Sololá y compite en su cuarta Vuelta a Guatemala con tan solo 22 años.
Lo quiere entrenar
Fermín se siente motivado y muy orgulloso de ver a su hijo siguiendo sus pasos y no descarta un día muy cercano poderlo entrenar para que logre trascender como él lo hizo.
“Me siento contento de ver que realiza sus sueños, es bonito verlo correr y siempre trato la manera de aconsejarlo para que vaya mejorando. Espero un día tener la oportunidad de ser su entrenador y trabajar de lleno para que esté listo para pelear por ganar una Vuelta a Guatemala”, dijo el excampeón.