Con la herida de su fracaso europeo aún fresca, el magnate catarí Nasser Al-Khelaifi, dueño del Paris Saint-Germain (PSG), emprendió un polémico viaje a Sudamérica para visitar al recién operado Neymar.
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El astro brasileño, quien se pedió la vuelta de los octavos de final de la Champions League contra el Real Madrid por una fractura del quinto metatarso del pie derecho, se encuentra recuperándose en su país natal previo al inicio de la Copa del Mundo de Rusia 2018.
La ausencia de Neymar, que a la postre repercutió en la temprana eliminación del PSG en Europa, desató los rumores sobre supuestas tensiones entre Al-Khelaifi y el entorno del jugador.
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Neymar llegó al PSG en el verano (boreal) procedente del Barcelona, en una controvertida y millonaria operación que rondó los 222 millones de euros. Se convirtió, además, en el traspaso más caro en la historia del fútbol moderno.
El padre del futbolista publicó en sus redes sociales fotos del encuentro con Al-Khelaifi en una lujosa residencia en Mangaratiba, un balneario situado a 100 kilómetros de Rio de Janeiro.
"Visita del día a @Neymarjr, gracias PSG", escribió Neymar Senior en el texto que acompañaba las imágenes.
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En una de las instantáneas también aparecen Antero Henrique y Jean-Martial Ribes, director deportivo y director de comunicación del PSG, respectivamente.
Para este martes está previsto que los dirigentes del club francés visiten en Praia Grande las instalaciones del Instituto Neymar, una fundación creada por el futbolista y su padre para favorecer la inserción de niños de zonas pobres a través de actividades deportivas.
Neymar se lesionó el pasado 25 de febrero en un partido contra el Olympique de Marsella. Pasó por el quirófano a principios de marzo, en una operación que estuvo a cargo del médico de la Selección de Brasil, Rodrigo Lasmar.
