El mediocampista croata Luka Modric es el jugador del momento. Pero su vida podría dar un giro inesperado después de que concluya el Mundial.
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La historia del famoso jugador está plagada de claroscuros. Desde su infancia a la vera del mar Adriático, donde su casa fue destruida durante la guerra de la independencia de Croacia hasta el presente que lo encuentra en la final de Rusia 2018.
Mientras Modric aspira a quedarse con el Balón de Oro al Mejor jugador del mundo, un asunto judicial eclipsa el presente del 10 del Real Madrid.
Incongruencias en su testimonio
Modric, podría ser condenado a cinco años de prisión. El jugador declaró como testigo en el juicio contra Zdravko Mamic, expresidente de la federación croata y del Dinamo de Zagreb.
Cabe recalcar, que Mamic, considerado desde hace años como el verdadero patrón del futbol croata, fue condenado a seis años de prisión por corrupción y malversación de fondos. Todo en marco de transferencias de jugadores, una de ellas la de Modric al Tottenham en 2008.
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Recientemente, la justicia encontró algunas contradicciones en su testimonio. El futbolista fue citado y en primera medida le había explicado al tribunal de justicia que había firmado un acuerdo con 2014. El arreglo establecía el giro de la mitad de sus ingresos por transferencias.
Pero, en una segunda declaración el jugador dijo que ese anexo se había firmado en 2008 cuando ya estaba jugando en el equipo inglés. Ese cambio de versión le costó ser inculpado de falso testimonio.
“Lo lamento. Pasé mucho tiempo en USKOK (departamento de investigación croata) y probablemente me equivoqué” explicó Modric. Las declaraciones las hizo semanas antes de jugar en el Mundial.
