Roman Reigns se subió al cuadrilátero, tomó el micrófono y destrozó el corazón de todos cuando anuncio que tiene leucemia, y tendrá que renunciar a su título.
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Esta vez verlo en el ring no era normal, no llevaba su tradicional chaleco negro, tampoco sus guantes, ni sus muñequeras. Iba vestido con ropa casual, tenía un semblante triste pero a la vez de valentía.
Y fue cuando en medio del cuadrilátero reveló que padece de leucemia y tendrá que renunciar a su título de la WWE para pelear una batalla aún más dura, contra su enfermedad.
Reigns, visiblemente afectado le contó al publicó que fue diagnosticado con leucemia cuanto tenía 22 años, ahora tiene 33, pero había logrado controlar la enfermedad, sin embargo, con el paso del tiempo, el mal volvió y por eso debe retirarse del mundo de la lucha libre.
También reveló que su verdadero nombre es Joe. El luchador le pidió a la afición que no sienta lástima por él, porque está seguro que una ve más vencerá la enfermedad.
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Llanto imparable
Tras bajar del cuadrilátero otras estrellas de la WWE le expresaron su apoyo, entre ellas HHH, Shawn Michaels, Natalya, Brie, Nikki, Finn Bálor, Apollo, Shasha Banks, Bobby Lashley y Titus O’Niel, quienes lo abrazaron.
Reigns ingresó a los escenarios de la lucha libre en 2010 y se proclamó campeón Mundial Peso Peesado de la WWE y campeón Universal de la WWE.
