Minutos después de que se dio a conocer que la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors se jugará en España, también se conoció el castigo a River.
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Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, anunció este jueves en conferencia de prensa que sí habrá final y se llevará a cabo el domingo 9 de diciembre en el Santiago Bernabéu a las 16:30 horas (13:30 de Guatemala).
Sin embargo, por otro lado, el Tribunal de Disciplina de dicha entidad anunció que desestimó el reclamo de Boca Juniors de que le otorguen el título de la Copa Libertadores de 2018 y ordenó jugar la revancha contra River Plate.
El organismo resolvió "no hacer lugar a lo peticionado en la denuncia presentada por Boca Juniors" y ordena "al Departamento de Competiciones de la Conmebol la reprogramación del partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors".
Además el citado Tribunal impuso a River "una sanción consistente en jugar sus próximos dos partidos como local en competiciones oficiales organizadas por la Conmebol a puerta cerrada. Esta sanción iniciará su vigencia a partir del año 2019" y le impuso "una multa de 400 mil dólares".
Ambos equipos igualaron 2-2 en el partido de ida de esta final, jugado el 11 de noviembre en el estadio La Bombonera, de Boca Juniors, sin que se produjeran incidentes.
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Mientras que el juego de vuelta debió reprogramarse en dos ocasiones, por las agresiones de hinchas de River, al autobús que transportaba a los jugadores “xeneizes” al Monumental, varios futbolistas sufrieron heridas.
*Con información de AFP
