Comunicaciones recibió de sus aficionados la respuesta esperada en el Clásico 308, pero las puertas fueron cerradas inesperadamente.
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El partido entre cremas y rojos tuvo una buena asistencia, pero las 6 mil500 entradas habilitadas no fueron suficientes.
Y es que la promoción de 2×1 en la mayoría de localidades del estadio Doroteo Guamuch Flores le funcionó a los cremas.
¿Qué ocurrió?
Pero cuando el partido vivía sus primeros minutos, la afición que aún pretendía entrar, se llevó una sorpresa.
La seguridad cerró las puertas del estadio porque ya se habían llenado las localidades habilitadas.
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Sin embargo, minutos más tarde se vieron obligados a abrir las puertas, pues eran muchos aficionados los que esperaban en la calle.
Ante esto, los cremas se vieron en la necesidad de utilizar un área que podría ser prohibida.
Ups, no se encuentra el tuit. ¿Tal vez lo eliminaron?
Se habilitó la localidad de general sur, que no debería tener aficionados, pues ahí se encuentra el marcador del estadio.
Además, porque cuando los equipos se dirigen hacia los camerinos, pueden sufrir agresiones.
Ups, no se encuentra el tuit. ¿Tal vez lo eliminaron?
Y esto pudo haber ocurrido, pues los rojos tuvieron que salir escoltados ante el lanzamiento de objetos de parte de la afición.
Festejo provoca coraje
Pero la peor nota del Clásico 308 fue la actitud de los aficionados cremas que se encontraban en la general norte.
Y es que tras anotar el gol del triunfo en el minuto 87, Alejandro Díaz provocó a los hinchas con su festejo.
Díaz se quitó la camiseta y se las mostró a los seguidores albos, al estilo Messi.
Aunque al final del encuentro "el Gambetita", lamentó lo ocurrido.
"Con respecto a la celebración… me salió del alma, no lo pensé y si hubiese sido un poquito más consciente no la hubiera hecho", dijo Díaz.
