El médico personal de Diego Armando Maradona, Leopoldo Luque, ha sido imputado en el marco de la investigación por el fallecimiento del astro argentino, sucedido el pasado miércoles, una operación en la que se han registrado tanto su domicilio como su clínica, ha informado este domingo el periódico argentino La Nación.
PUBLICIDAD
Según explica el diario, el magistrado del Juzgado de Garantías número 2 de la localidad de San Isidro, Orlando Abel Díaz, a petición de la Fiscalía y tras las declaraciones de tres de las hijas del fallecido, Dalma, Gianinna y Jana, ordenó registrar la casa particular y la clínica de Luque.
Con ello, se pretenden investigar las circunstancias de la muerte de Maradona, que falleció el miércoles sobre las 12.00 hora argentina tras sufrir una parada cardiorrespiratoria en su domicilio de la localidad de Tigre.
Las ambulancias desplazadas al domicilio del campeón del mundo de 1986 no pudieron reanimarle. En caso de que las pruebas relacionen al galeno, responsable del cuidado del exfutbolista tras abandonar el hospital donde fue operado de un hematoma en el cerebro, con el hecho, este podría ser acusado de “homicidio culposo”.
Maradona, ganador del Mundial de México 1986 con la selección argentina, fue ingresado de urgencia hace tres semanas en una clínica de la ciudad de La Plata con signos de anemia y deshidratación. Allí se le detectó un hematoma en el cerebro del que fue operado sin complicaciones. Tras ello, abandonó el centro hospitalario para continuar con su recuperación en su domicilio.
Diego Armando Maradona falleció a los 60 años en Argentina. A principios de este mes fue operado de urgencia de un hematoma en el cerebro. La leyenda del fútbol argentino sufrió un paro cardiorrespiratorio en su casa del barrio San Andrés, en la localidad de Tigre. Tras la llamada de auxilio varias unidades sanitarias intentaron reanimarle sin éxito. Maradona se encontraba bajo el cuidado de sus hijas y proceso de rehabilitación desde la operación del pasado 3 de noviembre.