Los dos últimos campeones de la Copa Libertadores, Palmeiras y Flamengo, batallarán el sábado en Montevideo por el trofeo de clubes más preciado de Sudamérica, un título que coronará la hegemonía brasileña en el fútbol regional.
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La final será el choque entre una de las nóminas más poderosas de América, la del Flamengo de Renato Portaluppi, ante un equipo con individualidades destacadas pero cuya fuerza es el colectivo, el Palmeiras del portugués Abel Ferreira.
Flamengo marcha invicto
El ‘Fla’, invicto en la competición (nueve triunfos, tres igualdades), aún conserva la base de aquella aplanadora conducida por el luso Jorge Jesus, aunque sus reveses en la semifinal de la Copa do Brasil y el campeonato local agrietaron la imagen de Renato.
Sin embargo, la sonrisa asoma en la cara del técnico, el de más victorias en la Libertadores (50). El volante uruguayo Giorgian de Arrascaeta, cerebro del equipo, venció una lesión muscular y acompañaría a ‘Gabigol’, goleador copero (10 tantos), en el ataque.
Con el charrúa sanado, aunque sin pleno ritmo, los cariocas tienen todas sus armas para pelear por su tercera Libertadores, tras las obtenidas en 1981 y 2019, entre ellas el arquero Diego Alves, los defensas Mauricio Isla, David Luiz y Filipe Luís, el volante Everton Ribeiro y el atacante Bruno Henrique.
Palmeiras no parece el favorito
Los paulistas, sostenidos en el arco por Weverton, en la defensa por el paraguayo Gustavo Gómez, en el medio campo por el recuperado Felipe Melo y en el ataque por Rony y Raphael Veiga, llevan semanas en una curva descendente que los privó de títulos en las competiciones locales de 2021.
Palmeiras ajusta cuatro partidos seguidos sin ganar (tres derrotas y un empate) y las críticas contra su filosofía de juego, para muchos conservadora, convierten la final en un salvavidas para Ferreira, quien en Montevideo apenas tendrá la baja del suspendido zaguero Marcos Rocha.
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“El mayor adversario mañana está dentro de cada uno de nosotros”, afirmó Ferreira, antes de agregar que el mayor pedido a sus futbolistas es que sean “fieles a su juego” y que lo hagan “de forma colectiva”.
De derrotar al Flamengo, que los venció en la Supercopa de Brasil en abril, sería el primer técnico europeo bicampeón de Libertadores y su once el primero en alzar dos veces consecutivas esta competición desde que Boca Juniors lo hiciera en 2000 y 2001.
*Con información de AFP