Pelé, el rey brasileño del fútbol, único en ganar tres Copas del Mundo y una de las máximas figuras deportivas del último siglo falleció el jueves. Tenía 82 años.
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El astro, cuyo nombre se convirtió en sinónimo de excelencia del fútbol y símbolo del “jogo bonito” brasileño, se había sometido a un tratamiento contra el cáncer de colon desde 2021 y permaneció hospitalizado el último mes.
Pelé, descanse en paz
Al mito brasileño le diagnosticaron un cáncer de colon en 2021 y en varias ocasiones tuvo que ser hospitalizado por problemas de salud. La situación se agravó en diciembre de 2022 con problemas renales aunque pudo disfrutar del Mundial de Qatar 2022.
Hoy, 29 de diciembre, se apagó la vida del jugador brasileño. “Todo lo que somos es gracias a ti Te amamos infinitamente. Descanse en paz”, escribió su hija Kely Nascimento en Instagram.
El brasileño deja un legado casi inigualable. En su palmarés figuran tres Mundiales (1958, 1962 y 1979), dos Intercontinentales con Santos además de numerosos récords a nivel individual. Todavía hoy es el máximo goleador de la historia de la selección brasileña. Comprometido con las causas sociales,
Pelé fue nombrado en 1977 embajador de las Naciones Unidas y le fue entregada la condecoración de “Ciudadano del Mundo” por parte de la ONU. También fue incluido en el Comité de Juego Limpio de la FIFA y es Embajador de Buena Voluntad de la Unicef.
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Con su fallecimiento, el mundo del fútbol pierde a uno de sus grandes referentes. Brasil vive en estos momentos un profundo luto por la muerte del mejor jugador de su historia y del que su figura trascendía el mundo del deporte.