La youtuber Marina Joyce, quien tiene casi dos millones de suscriptores en su canal, levantó sospechas respecto a su muerte entre sus fans, debido a que existía la posibilidad de que su novio estuviéra teniendo fuertes problemas con ella o que la joven estuviera metida en las drogas.
La policía británica de Enfield se dirigió a su domicilio para saber cómo se encontraba tras los múltiples comentarios de su público en Twitter. Sin embargo, se descubrió que Joyce estaba viva, sana y feliz.
Las sospechas por parte de sus followers se debieron a que en sus últimos videos la estrella de Youtube presentaba moretones y parecía intimidada, además de que se veía más delgada.
Las teorías respecto a su salud suponían un maltrato por parte de su novio o a causa de las drogas. Tal fue el temor de los fans de Marina, que estos realizaron toda una campaña en Twitter creando el hashtag #Savemarinajoyce.
Durante una entrevista que se le realizó poco antes de su desaparición con el periodista y productor Philip DeFranco, la youtuber afirmó que se encontraba bien y en relación a sus moretones expuso que había ido al bosque y que se había lastimado con algo sin darse cuenta.
Ante los cambios de actitud, ella mencionó que tal vez eran consecuencia de sus nuevas creencias religiosas: “Ahora soy budista”, compartió.
Afortunadamente para sus suscriptores, Marina subió un video que descartó por completo todas las hipótesis respecto a su muerte. En el video incluso agradece por la campaña: “Creo que fue muy dulce pero quiero hacerles saber que estoy bien y soy una persona muy feliz”.
Marina Joyce tiene 19 años. Nació en el norte de Londres en 1997 y tiene un hermano mayor. A los 16 años inició su videoblog centrado en la moda y en los tutoriales de maquillaje.