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¿La razón? La producción del reality show desea proteger a Kim
Keeping up with the Kardashians se suspende. El violento asalto que sufrió Kim Kardashian el pasado 3 de octubre en París fue un suceso que acaparó los reflectores. Tanto la familia Kardashian como famosos allegados a las estrellas de TV se mostraron consternados ante tal evento.
La suma estimada del botín fue de 15 millones de euros (16.8 millones de dólares). Perdiendo entre sus joyas el anillo que le regaló Kanye West el día de su boda, que tenía un costo de más de 4 millones de dólares.
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Además, la familia de la más famosa de las Kardashian guardó silencio tras el incidente. Recién se reincorporaron a las redes sociales el pasado miércoles.
Y Caitlyn Jenner fue la única que abordó directamente el robo. De hecho, compartió el siguiente mensaje en Instagram: “Amo a mi hija. Después de escuchar la historia completa agradezco que ella se encuentre bien. Es un recordatorio de que todos debemos tener más cuidado.
Todo indica que la socialité está totalmente afectada, ya que según una fuente cercana, temía que la asesinaran y violaran.
Sin embargo, la noticia que actualmente está sorprendiendo a sus fans es que las grabaciones de “Keeping Up with the Kardashians se suspenden por tiempo indefinido.
La información fue confirmada por el sitio “Access Hollywood. Por su parte, la producción mencionó: “El bienestar de Kim es nuestro enfoque principal en este momento (…) “No se ha tomado una decisión en cuanto a cuándo se reanudará la producción.
Keeping up with the Kardashians sufrirá las consecuencias del robo a Kim
“Kim fue atada, amordazada y le envolvieron la cabeza con cinta adhesiva. Le pusieron ataduras de plástico alrededor de las muñecas. Pero consiguió quitárselas retorciéndose las manos”, indicó una fuente cercana a la estrella televisiva. “Estaba histérica, pero no gritó. Sabía que tenía que guardar silencio para sobrevivir. Llegó a creer que la iban a violar. Tenía una pistola en la cabeza todo el tiempo “.
Según el portal de espectáculos “TMZ”, en el momento de los hechos Kim Kardashian estaba acostada, únicamente con su bata puesta. De repente escuchó pasos en el departamento de dos pisos, ubicado en el lujoso distrito 8 de París.
