Ariana Grande regresó a los Estados Unidos en un jet privado después de haber suspendido su gira europea por el atentado al finalizar su concierto en Mánchester.
Desconsolada, en shock por el ataque terrorista que dejó al menos 22 muertos y 59 heridos, la cantante regresó a América.
Ariana volvió a buscar fuerzas en su ciudad natal de Boca Ratón, en Florida. Salió de un avión privado visiblemente afectada acompañada de su mamá.
La cantante de 23 años se fundió en un largo abrazo con su novio, el rapero Mac Miller, tal como lo muestran unas fotografías que circulan en las redes.
Su madre, Joan, estaba como espectadora entre el público del Manchester Arena y ayudó a mucha gente a salir por el backstage.
¡Apoyo total!
Luego del terrible, miles de personas han publicado mensajes de apoyo para la estrella y para los familiares de las víctimas.
Por ahora, ni ella ni sus representantes han dado más declaraciones de lo sucedido.
Las autoridades continúan investigando para capturar a más personas que puedan estar involucradas en el ataque o vinculados con el Estado Islámico.