Jennifer Grey fue quien protagonizó una de las películas más icónicas de Hollywood, “Dirty Dancing”, que en muchos países se conoció como Baile Caliente.
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Una de las escenas más emblemáticas de la cinta, es cuando Johnny Castle, papel interpretado por Patrick Swayze, carga a Baby al compás del tema “(I’ve Had) The Time of My Life“, canción ganadora de un Oscar y un Globo de Oro.
A partir de ese momento su fama creció; sin embargo, hubo un hecho que cambió el rumbo de su carrera para siempre.
Pese al éxito, a la actriz que no le gustaba su aspecto y decidió hacerse una cirugía estética para cambiar su nariz, pero el resultado no fue el esperado ya que cambió por completo su rostro.
La transformación fue tan sorprendente que ni sus amigos lograban reconocerla y mucho menos el público. Esto afectó mucho su profesión ya que perdió todos los trabajos que había negociado hasta el momento.
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Ella nunca habló del tema, 30 años después reveló el motivo que la llevo a alejarse de las pantallas, recordando un accidente que le cambió la vida.
¿Qué pasó?
En una entrevista para la revista People, Grey habló por primera vez del trágico accidente que tuvo junto a su pareja y que este le cambió la vida, dándole la espalda al mundo del cine.
Tenía 25 años cuando se fue de vacaciones a Irlanda con su novio de ese entonces, Matthew Broderick, pero en un viaje por la carretera tuvieron un accidente, chocaron contra otro automóvil. En el que viajaban una madre y su hija, quienes murieron trágicamente en el acto.
Aunque la actriz no sufrió daños, solo algunos moretones, el accidente le generó un trauma que hasta el día de hoy permanece en su mente y alma.
Ella trato de rehacer su carrera, pero a pesar del éxito que tenía no pudo disfrutarlo.
“El dolor sobrepasaba la alegría que me daba mi carrera, no me sentía bien. Mi cabeza nunca volvió a ser la misma, mi ambición nunca volvió a ser la misma.”, fue parte de sus declaraciones en la entrevista.
Por eso a los 27 años se retira de la actuación.
