Marisha Dotson de 28 años, pese a que le ganó la batalla al cáncer, sigue viviendo duros momentos y asegura que pronto se quedará sin hogar.
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"Me mantengo a la espera de que las cosas mejoren. Nada parece alinearse. Siempre es difícil y estresante. Realmente necesito un saco de boxeo cuando siento que todo está burbujeando fuera de control, y me enojo tanto con lo injusta que puede ser la vida", escribió la joven en su perfil de Instagram.
Dotson también pidió ayuda a las personas, para que su hermano consiga un trabajo y no queden sin hogar.
"Para colmo de males, mi hermano que vive conmigo, está teniendo un momento extremadamente difícil para encontrar un trabajo que lo ayude con las cuentas, y eso hace que mi nivel de estrés sea mucho más alto. Alguien le da un trabajo para que pueda ayudarnos a no quedar sin hogar", afirmó.
Sobreviviente
Hace un tiempo, a la joven le salió un grano en la punta de su nariz, con el tiempo le creció y acudió al médico quien le dio la terrible noticia.
Marisha tenía un carcinoma de células escamosas. Los doctores le dieron pocas posibilidades de sobrevivir. La inofensiva espinilla se había convertido en un cáncer que se había extendido a su nariz y mandíbula.
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La joven mujer se sometió a una cirugía de más de 15 horas donde lograron extirpar el carcinoma, pero los médicos notaron que el tumor ya estaba diseminado en el tejido.
Dotson cuenta que la cirugía fue muy dolorosa a pesar de tener mas de 300 inyecciones de anestésico en su cara.
Ante el panorama, los médicos no tuvieron mas opción que remover cartílago y mucho tejido. Marisha perdió dos tercios de su nariz y le fue reconstruida posteriormente con piel de su frente.
“Podía sentir que había una parte de mi rostro perdido, pero cuando me miraba en el espejo estaba devastada, tenía un agujero enorme donde solía ver mi nariz” comentó.
Una nueva visita al quirófano
Poco tiempo después de las dolorosas intervenciones quirúrgicas, otras lesiones cancerosas aparecieron en su rostro.
Su mejilla derecha, la zona bajo su ojo derecho, la parte superior del puente de la nariz y la parte debajo de su nariz mostraban nuevas lesiones.
Marisha volvió a someterse a dolorosas operaciones a pesar de las bajas probabilidades de supervivencia.
En estas cirugías los doctores extrajeron huesos de la mandíbula, gran cantidad de tejido, la cavidad del seno nasal y perdió ocho dientes.
Actualmente la joven es una sobreviviente y no le importa su apariencia solo se siente “afortunada de estar viva.
