Sexo, amor, pérdida, autoflagelación, adicción y recuperación. No son muchos los temas que Jada Pinkett Smith, su madre Adrienne Banfield-Norris y su hija de 17 años, Willow, no estén dispuestas a abordar alrededor de una pequeña mesa en un programa peculiar de Facebook que tiene una audiencia femenina en aumento.
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Y esa, dijo Pinkett Smith en una entrevista reciente, es la idea.
Pinkett Smith, quien ha sido tanto invitada como productora de programas de tertulia, considera que "Red Table Talk" es un programa íntimo, auténtico y fluido difícil de lograr a través de canales más tradicionales. El programa semanal debutó hace un mes en Facebook Watch e incluye extras en vivo como preguntas de los espectadores y apariciones especiales de amigos y familiares.
“No se trata de un formato”, dijo. “Quiero que siga teniendo ese ritmo orgánico, no quiero nada forzado”.
Definitivamente no suena forzado cuando las tres generaciones se adentran en territorio delicado.
Hasta ahora Willow ha revelado que alguna vez se infligió heridas, que odiaba su fama por "Whip My Hair" y que hace años descubrió a su mamá y su papá, Will Smith, teniendo sexo. Pinkett Smith dijo que ella misma tenía 9 años cuando su abuela la puso al corriente sobre las maravillas de la masturbación y que tiempo después pasó un periodo positivo satisfaciéndose con juguetes sexuales, a veces logrando tener múltiples orgasmos en hasta cinco exploraciones en un día.
Norris, a quien le dicen de cariño Gammy, habló honestamente sobre sus pasados problemas de adicción a las drogas y el dolor de perder una hija. Pinkett Smith y la actriz Gabrielle Union hablaron de su pleito de 17 años y cómo se reconciliaron. Pinkett Smith y la primera esposa de su marido, Sheree Fletcher, pasaron momentos más difíciles criando a Trey, el hijo de Fletcher con Will Smith.
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Gammy señaló que no siempre estaba de acuerdo con las libertades poco convencionales que Will y Jada han permitido a sus hijos, incluyendo a Jaden de 19 años, quien pudo mudarse solo a los 15.
La idea, dijo Pinkett Smith, es dar fe de los hechos en vez de sermonear. Lo primero requiere más valentía y es mucho más beneficioso, dijo.
“Hablamos tanto sobre lo que pasa fuera de nosotros y no hablamos suficiente de lo que pasa adentro”, dijo Pinkett Smith, quien rindió homenaje esta semana en Instagram a los difuntos Anthony Bourdain y Kate Spade al tiempo que reconoció que ella misma había contemplado el suicidio en el pasado.
“Todos pasamos por cosas. Todos sentimos dolor. Todos estamos tratando de superarlo. A aquellos que hayan llegado a entender aunque sea un poquito de esto, por favor cuéntenme sus historias porque quizá yo misma pueda obtener una respuesta. De eso se trata mi programa”, dijo.
Compartir temas tan delicados requiere “llegar a un cierto lugar donde tienes un profundo sentido de comodidad contigo misma”, dijo Pinkett Smith, quien recientemente actuó en la comedia "Girls Trip".
El control es la clave y Facebook es tan solo el lugar para mantenerlo suelto, dijo.
El programa surgió de un video del Día de las Madres que hicieron las tres cuando Willow tenía 12 años. La socia productorade Pinkett Smith Ellen Rakieten, junto con Miguel Melendez, fue la que sugirió que lo revivieran. Facebook está comprometido a emitir 10 episodios, pero es posible que la serie se extienda.
“Quería un lugar donde la gente se sintiera lo suficientemente cómoda para hablar de cosas reales, donde realmente puedas tener una conversación honesta, con una naturaleza honesta y sin tener que preocuparte”, agregó Pinkett Smith. "Facebook crea un cierto nivel de intimidad y comunidad. Puedo entrar a Facebook y hablar de verdad con la gente”.
El programa tiene un grupo en Facebook con unos 280.000 miembros donde ocurren conversaciones regulares y esas interacciones. Su primera charla junto a la mesa roja, que se encuentra en la casa de Pinkett Smith en California, ha sido vista unas 27 millones de veces. El episodio más reciente, que se transmitió esta semana, se ha reproducido unas 4 millones de veces. El programa se transmite los lunes y las sesiones de preguntas los miércoles.
“Me encanta poder hablar con la gente”, dijo Pinkett Smith. "Nuestra comunidad está creciendo cada día y soy parte de ella y de hecho estoy en ella. Eso es lo que me encanta. Nos encanta la comunión femenina, donde las jóvenes y las mayores pueden aprender unas de las otras. Se siente como un viejo ritual entre mujeres, ya sea en la cocina cocinando y hablando o en otra parte. Eso es difícil de encontrar por estos días”.
