La Máster en Lexicografía Hispánica María Raquel Montenegro tomó posesión esta semana como la nueva directora de la Academia Guatemalteca de la Lengua correspondiente de la Real Academia Española. Publinews conversó con ella acerca de sus retos y motivaciones.
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¿Por qué se postuló para este cargo?
Por la oportunidad de hacer cambios. Creo que desde la Academia se puede aportar al estudio del español y la investigación sobre aspectos del español en Guatemala.
Usted se convirtió en la primera mujer en presidir esta institución. ¿Qué significa romper con un legado de que solo hombres la habían dirigido?
Esto significa un gran avance en la Academia, que de a poco está abriendo espacios para que las mujeres participemos en espacios de toma de decisiones y que equipos equitativos puedan dirigir y participar en actividades de la institución.
¿Cuál es el aporte al país de la Academia?
Por un lado, la Academia puede aportar a los estudios panhispánicos, en el sentido de todos los ámbitos en donde se habla el español.
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Puede aportar a la descripción del español en general, así como a las obras académicas que elabora y divulga la Asociación de Academias de la Lengua, que agrupa a todas las academias de español en España y América.
También puede abrir oportunidades para que se realicen estudios de lenguaje y de cómo se utiliza el español en Guatemala.
Y en el plano personal, ¿cómo surgió su pasión por las letras?
Surgió desde que era muy pequeña. Me gustaba mucho leer y recuerdo especialmente que, a final de año, iba a la biblioteca y pedía mis libros para las vacaciones, y los leía.
En mis tiempos de estudiante leía las obras de José Batres Montúfar y Pepe Milla, y después tuve maestros que me despertaron la pasión por la literatura y el lenguaje. Recuerdo ver a mi maestra de secundaria dar clases y pensar: “Eso quiero hacer de grande”.
Para usted, ¿cuál es la principal importancia de promover el idioma español y la literatura en Guatemala?
Existen dos factores: El primero es que el interés por la literatura debe fomentarse desde el colegio y que haya enseñanza directa de la literatura. El segundo es que se tenga un espacio y tiempo específico para hacerlo.