Este domingo se enfrentarán los Rams contra los Patriots en la batalla del Super Bowl, uno de los días más esperados para los aficionados del futbol americano.
Muchos añoran ver en show de medio tiempo, que siempre sorprende. Este año se presentará la banda Maroon 5.
Conseguir quien compartiera el escenario con ellos fue una de las tareas más difíciles que le ha tocado a los organizadores.
La historia viene desde 2016, ¿La razón? Todo fue por Colin Kaepernick, quien era el mariscal de campo de los 49ers de San Francisco.
El jugador se negó a entonar de pie el himno nacional de Estados Unidos, algo que se acostumbra hacer por respeto hacia la bandera de ese país.
Su acción generó todo tipo de reacciones, desde las negativas, hasta las que no sólo decidieron felicitarlo, sino que también lo imitaron.
Según se reveló él decidió no pararse responde a una cuestión racial, pues fue la manera en que el jugador protestó contra el abuso policial hacia los afroamericanos y la discriminación racial, como expresó al final de ese juego.
"No voy a levantarme y mostrar orgullo por la bandera de un país que oprime a la gente negra y de color.
Para mí, esto es más importante que el fútbol y sería egoísta por mi parte mirar hacia otro lado", expresó.
Las repercusiones
A él se sumaron otros jugadores durante los siguientes juegos, en lugar de ponerse de pie durante el himno y se hincaron en señal de repudio al racismo en Estados Unidos.
Otros jugadores se sumaron a la protesta de Kaepernick durante los siguientes juegos, y en lugar de ponerse de pie durante el himno comenzaron a hincarse en señal de repudio al racismo en Estados Unidos.
En respuesta, el presidente Donald Trump en persona tuiteó que quienes no se paraban durante el himno eran unos "hijos de puta" y le pidió a los dueños de la NFL y los equipos a sancionar, suspender o despedir a los jugadores que siguieran con esta práctica, algo que finalmente, consiguió.
En 2018 la NFL amenazó con multar a jugadores y equipos que no estuvieran de pie durante el himno.
Al término de esa temporada a Kaepernick no le fue renovado el contrato con San Francisco ni logró entrar a otro equipo, una práctica que él denunció como discriminación hacia su activismo y su ideología política.
Los famosos se niegan
En respuesta a lo sucedido a Kaepernick, las celebridades comenzaron a pronunciarse en contra de la NFL, y llegado el momento de escoger a quien cantaría en el Super Bowl LIII, a negarse.
Antes de que Maroon 5 fuera oficialmente la banda que amenizaría el medio tiempo del Super Bowl, otros famosos rechazaron presentarse, en apoyo a Kaepernick y como protesta no sólo al racismo, sino a las medidas tomadas por la NFL.
Algunos de los cantantes que se negaron a presentarse fueron Rihanna, Jay-Z, y Cardi B.
Aunque Maroon 5 ha tratado mantenerse alejados de el tema, han sido muchas la firmas que sus fanáticos han recopilado para pedirles que rectifiquen y no se presenten al evento.
También fue complicado encontrar a otros artistas que cantarán con ellos, pues prácticamente todos estaban de acuerdo con la protesta y en contra de las medidas de la NFL.
Al final lo que convenció a la banda liderada por Adam Levine fue una donación de medio millón de dólares a la asociación Big Brothers Big Sisters of America.
La misma suma fue pactada para la organización Dreams Corp a cambio de que el rapero Travis Scott los acompañe en el escenario.