Kim Kardashian no deja de sorprender a los usuarios en las redes sociales, pues recientemente hizo una publicación con el objetivo de cautivar a más de uno.
En esta oportunidad, la socialité estadounidense decidió celebrar que llegó a obtener los 170 millones de seguidores en Instagram; mientras su hermana más pequeña, Kylie Jenner, ya la supera en seguidores con 175 mm.
Por esta razón, la protagonista de "Keeping Up With the Kardashians" enamoró a sus fanáticos dejando tres postales de ella presumiendo sus curvas luciendo un infartante y ajustado vestido verde.
"170 millones, wow. ¡Los quiero tanto a todos!", expresó la empresaria de 39 años desde su perfil oficial.
Como era de imaginarse, los followers de la esposa de Kanye West no tardaron en invadir la red de los corazones con miles de elogios para ella y un sinfín de "Me gusta".
Hace unos días, la empresaria enloqueció a todos posando completamente desnuda, solo cubierta con un collar de flores blancas y acompañada de un loro.
Esta sensual imagen fue para publicitar su línea de belleza, cosmética y cuidado personal, KKW Beauty, y parece que le ha salido bien la estrategia ya que en pocas horas su foto ya contaba con mas de 2.2 millones de ‘me gusta’.
¿Divorcio?
El confinamiento está siendo duro para muchas familias ya que el hecho de permanecer encerrados, todos juntos, durante tantos días está generando algunos conflictos.
Hay parejas que están decidiendo poner fin a sus relaciones durante esta cuarentena y la de Kim y Kanye West podría ser una. Los problemas conyugales se han agravado desde que todos, sus cuatro hijos incluidos, están encerrados en casa, y en la prensa ya circulan rumores de divorcio.
Las agendas profesionales de ambos les suelen tener tan ocupados que su día a día no pasa por estar 24 horas juntos. Hace unas semanas el rapero se llevó a sus hijos al rancho que poseen en Gwyoming para dar un descanso a su mujer y que ésta pudiese disfrutar de la soledad del hogar.
Tal y como publica Us Weekly, ella "necesita distanciarse un poco de Kanye" después de llevar acumuladas semanas de discusiones porque él no se ocupa de sus hijos como debiera, dejando todo el peso de su cuidado sobre ella.