Erika Zaba respondió a las críticas por el vestuario que usó durante el concierto acústico que ofreció OV7 el pasado domingo.
Los fans tacharon a la cantante de “ridícula”, “nada elegante” y “fuera de lugar” por aparecer con un body negro transparente, mientras que sus compañeras lucieron atuendos conformados por pantalones y bustiers.
La mujer de 42 años justificó la elección del sensual y tan atacado vestuario, el cual aceptó usar porque es una artista capaz de arriesgarse sobre el escenario, quien confía en el trabajo que hace con su cuerpo.
Aceptó que no contempló el concepto acústico del show que dieron y mucho menos el vestuario que sus compañeras, Mariana Ochoa, Lidia Ávila y M’Balia Marichal.
Este fue el primer concierto en línea que ofrecieron después de posponer su gira de los 30 años.
La cantante se defiende
“Mi error fue no haber revisado antes que era un acústico y no un concierto en vivo”, se defendió ante las críticas en redes sociales.
Mencionó que ella conoció su vestuario hasta momentos antes de su presentación y aunque se sintió extraña, tuvo el respaldo de quienes la arreglaron aquella noche.
“Minutos antes de salir al concierto me llevaron el vestuario, el cual no había visto, cosa que no acostumbro porque soy muy cuidadosa y siempre lo reviso. Esta vez no y cuando me lo puse me sentía súper destapada, pero los maquilladores me dijeron que me veía bien, así que yo salí segura y como mujer empoderada”, mencionó.
La cantante defendió la figura que tiene y por la que ha trabajado arduamente desde que tuvo a su hijo Emiliano hace casi un año.