Jennifer López y Ben Affleck sorprendieron a todos con una boda íntima en Las Vegas, cerrando así con broche de oro a la historia de amor que comenzó hace dos décadas y que incluyó una ruptura ‘temporal’ que se alargó 17 años.
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Poco a poco han ido saliendo a la luz detalles sobre el enlace, que se celebró a las doce y media de la noche después de que la cantante y el actor esperaran pacientemente su turno en una de las famosas capillas de la ciudad.
A través del newsletter On The JLo que la Diva del Bronx reveló detalles de su boda secreta, dejando en claro que la información era cierta, pues se habían convertido en ‘marido y mujer’ el pasado sábado, 16 de julio.
“Sí, lo hicimos. El amor es hermoso. El amor es amable y resulta que el amor es paciente. Veinte años de paciencia”, escribió en las primeras líneas de su comunicado.
También compartió con sus millones de seguidores algunos detalles sobre cómo fue que decidieron unir sus vidas en matrimonio, así como de la inmensa fila que realizaron para cumplir su sueño de casarse.
“Anoche volamos a Las Vegas, hicimos fila para obtener una licencia con otras cuatro parejas, todas haciendo el mismo viaje a la capital mundial de bodas. Apenas llegamos a la pequeña capilla blanca para bodas a medianoche. Tuvieron la amabilidad de permanecer abiertos hasta tarde unos minutos. Permitiéndose tomar fotografías en un Cadillac descapotable rosa.
Cuando el amor es real, lo único que importa en el matrimonio es el uno al otro y la promesa que hacemos de amarnos, cuidarnos, comprendernos, ser pacientes, amorosos, y buenos el uno con el otro. Tuvimos eso. Y mucho más. La mejor noche de nuestras vidas”, reveló.
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Vestidos de la cantante
Una de las grandes incógnitas era el atuendo que elegiría Jennifer López, que se ha vestido de novia en varias ocasiones, tanto en la ficción como en la vida real, ya que ha estado casada en tres ocasiones anteriormente.
Esta vez JLo optó por reutilizar un antiguo vestido que se puso en una de sus películas para uno de los dos looks que lució en su gran día. El primero fue un vestido con un corte muy sencillo que llevaba tiempo en su clóset a la espera de que se presentara una ocasión especial.
“Lo tengo desde hace muchos años, y he estado reservándolo, y reservándolo, y ahora me lo voy a poner para mi boda”, explicó ella muy emocionada en un vídeo de Instagram justo antes de salir rumbo a su boda.
Más tarde se cambió en la capilla para enfundarse un diseño más elaborado de Zuhair Murad con escote barco, mangas largas, un corsé y una discreta cola que llevó para darle el sí quiero a su flamante esposo.
No está claro cuál de los dos vestidos es el que se ha puesto anteriormente frente a las cámaras, porque en las imágenes que ha compartido no se puede apreciar el segundo en su totalidad.
