El miércoles 20 de abril estaba previsto que en el Juzgado de Mayor Riesgo B se iniciara la audiencia de primera declaración en el caso del soborno de 30 millones de dólares que se habría pagado para lograr la firma de un contrato entre el Estado y la empresa Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ).
Ese día fueron llevados los acusados, entre ellos el expresidente, Otto Pérez Molina y la ex vicemandataria, Roxana Baldetti. En este nuevo encuentro se saludaron de beso en la mejilla.
La audiencia fue suspendida para darle tiempo a la defensa a preparase mejor.
Para ese día el presidente, Jimmy Morales, se encontraba en Estados Unidos. Fue entrevistado por medios locales y al ser cuestionado acerca del caso no despejó las dudas de lo que pasará con el contrato.
Al día siguiente Publinews tuvo acceso al audio del anticipo de prueba del colaborado eficaz, Juan Carlos Monzón.
La Procuradora General de la Nación (PGN), María Eugenia Villagrán, era citada por diputados del Congreso de la República. Entre las primeras acciones que anunció estaba la denuncia que haría contra el gabinete de gobierno de Pérez Molina.
Otro funcionario de gobierno indicaba que una vía es intervenir la empresa TCQ, en lo que se anula el contrato.
En la investigación se reveló que la Corporación Financiera Internacional (IFC), miembro del Banco Mundial, adquirió acciones en TCQ. La financiera se pronunció sobre el supuesto soborno.
La acción más reciente en el caso TCQ la dio a conocer el domingo el jefe de bloque de Libertad Democrática Renovada (Líder), Roberto Villate, quien presentó un amparo ante la Corte de Constitucionalidad (CC) para que el presidente Morales declare lesivo el contrato.
Para este lunes está previsto que se continúe con la audiencia de primera declaración.