En el caso más reciente de defraudación tributaria la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) detectó facturas anómalas. Para combatir ese ilícito le apostará a la facturación electrónica.
El jefe de la SAT, Juan Francisco Solórzano Foppa, explicó en el programa A Primera Hora de Emisoras Unidas que la facturación electrónica también exige una certificación en línea para que todos los negocios estén conectados con el ente fiscalizador.
Aunque aceptó que no es una tarea fácil, tampoco la ve imposible, incluso, con negocios pequeños como tiendas, donde bastaría un teléfono celular que permita conexión con un aparato POS (abreviatura de punto de venta) para lograr el objetivo.
El beneficio para el comerciante es que puede ampliar la cantidad de clientes al recibir pagos con tarjeta de crédito o débito, explicó.
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El impacto de perseguir evasores
Solórzano Foppa aseguró que luego de conocerse la persecución contra empresas que han defraudado el fisco, hay otras que se han acercado a la SAT para “regularizar su situación”. Aunque habló del pago de “cientos de millones” en impuestos, el funcionario no dio cifras exactas ni nombres.
Además de la tecnología, la SAT contratará unos 300 contadores públicos para fortalecer departamentos como el de “Entes Exentos”, donde se buscará verificar que las instituciones beneficiadas no abusen del privilegio que tienen, indicó.
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Evadir al fisco es causa de persecución penal
En el programa también estuvo la subsecretaria del Ministerio Público (MP) Ana Elena Guzmán, quien explicó que en el caso de la intervención del Hotel Camino Real por defraudación tributaria, los responsables podrían recibir una pena de 1 a 6 años de prisión.
En cuanto al monto a pagar, explicó que asciende a aproximadamente Q44 millones, ya que aunque en sí la defraudación fue de poco más de Q21 millones, a eso se le suma el 100 % de multa y los intereses.
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Guzmán indicó que cuando reciben una denuncia de la SAT, se realiza una investigación para verificar incluso si existen en físico las empresas que emiten facturas.
Solórzano Foppa lamentó que existan aún personas o empresas que ofrezcan venta y compra de facturas, hecho que es prohibido por la ley, explicó.