Este viernes 30 de septiembre se celebra nuevamente el Día del Bibliotecario en Guatemala. Esta noble profesión ayuda e instruye a las personas para identificar y acceder de manera más rápida a la información que se necesite con respecto a libros de texto, revistas y demás.
Sin embargo, la tarea del bibliotecario ha ido evolucionando. Con la vanguardia de la tecnología, y con la llegada de los libros electrónicos, por ejemplo, esta persona cada vez tiene más horizontes con respecto a la información literaria.
En Guatemala existen bibliotecas y hemerotecas que resguardan fielmente infinidad de libros, colecciones, enciclopedias y artículos que permiten su consulta durante muchos años. Prácticamente, el bibliotecario es una persona fundamental en cuanto a fuentes de información.
La Biblioteca Nacional de Guatemala “Luis Cardoza y Aragón” se fundó el 18 de octubre de 1879 por medio de un decreto promulgado y abrió sus puertas al público en 1800 en el edificio de la Sociedad Económica. Desde entonces sufrió varios traslados hasta su final establecimiento en la sexta calle entre cuarta y quinta avenidas de la zona 1.
El Día del Bibliotecario en Guatemala se celebra en honor a Jerónimo de Hipona, quien nació en el año 342 después de Cristo. Este personaje fue un estudioso que vivió como ermitaño en el desierto de Esmirna durante muchos años.