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El interventor de la Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ) Alexander Aizenstatd ve necesario que a partir de enero comience operaciones dicha terminal ya que de lo contrario no tendrá liquidez para continuar y la obra se perderá.
Esa fue una de las conclusiones que dio a conocer un su informe de siete meses como interventor donde reiteró que la situación financiera es crítica.
Un ejemplo de la crisis de TCQ, según el interventor, es que se ha incumplido con un pago de 4 millones de dólares a capital de una deuda.
Pese a la situación, por el momento se ha contratado a unas 20 personas pero también se han finalizado contratos que “pueden generar conflicto de intereses”, expuso.
Aizenstatd dijo que semanalmente se realizan pagos semanales, aunque no son aprobados todos los que pide la gerencia. Asimismo, explicó que la contabilidad de la terminal se encuentra en una caja fuerte y también se ha entregado información al Ministerio Público (MP).
Eficiencia
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El interventor aseguró una de las ventajas de que entre en operaciones TCQ es que cada contenedor se tardará 40 minutos en todo el proceso para salir, cuando en la Empresa Portuaria Quetzal (EPQ) se demora 2 días.
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Además, indicó que la terminal cuenta con todas las certificaciones para operar, pese a la situación financiera.
