El 12 de febrero de 2016 quedará marcado como una fecha histórica, tras la esperada primera reunión entre el papa Francisco y el patriarca Kirill en Cuba.
Se trata del primer encuentro entre líderes del cristianismo de Occidente y Oriente desde la fractura de 1054.
“Finalmente nos encontramos. Somos hermanos”, dijo el pontífice al encontrar al patriarca ruso. “Está claro que este encuentro es la voluntad de Dios”, agregó.
El papa Francisco llega a la isla antes de partir rumbo a México, donde millones de fieles católicos le esperan con los brazos abiertos.
“Esto es un viaje colmado por compromisos, que ha sido deseado por mi hermano Kirill, por mí y por los mexicanos”, dijo el Papa a los periodistas que viajan con él en el avión.
A su llegda a La Habana, el pontífice fue recibido por el presidente cubano, Raúl Castro, un ateo comunista de 84 años, quien oficia como anfitrión y facilitador de este histórico acercamiento entre ambos líderes religiosos.