La compañía Tokyo Electric Power (Tepco), gestora de la central nuclear de Fukushima, congela el suelo de una cavidad subterránea para frenar el escape de agua radiactiva.
“Hemos empezado esta operación“, explicó Tepco, que el miércoles recibió el permiso de la autoridad nuclear de Japón. El objetivo es evitar que el agua de una montaña cercana penetre en el subsuelo de la central y cree grandes cantidades de líquido radiactivo.
Si finalmente se consigue evitar que el agua entre continuamente en las instalaciones y luego se escape hacia el océano, Tepco espera poder avanzar más rápidamente en las tareas de descontaminación.
Las obras para poner en marcha este “muro de hielo” empezaron en 2014 y consisten en implantar tubos verticales en el suelo, alrededor de los edificios de los cuatro reactores más dañados.
Luego se inyecta en los tubos un líquido refrigerante para congelar el suelo alrededor de los reactores y crear así un “muro”.