Más de 30 personas murieron al suroeste de Yemen en unos intensos combates entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes hutíes en las afueras de la ciudad de Taez, informaron este viernes una oenegé y fuentes militares.
Las escaramuzas hicieron trizas las esperanzas de que las partes en conflicto en Yemen respeten la tregua anunciada por el secretario de Estado estadounidense John Kerry y que debía entrar en vigor el jueves.
Un total de 24 insurgentes y 14 miembros de las fuerzas leales al gobierno murieron en las últimas 24 horas en los combates en los suburbios de Taez, informaron fuentes militares progubernamentales.
Según estas últimas, dos civiles perdieron la vida y otros 16 resultaron heridos cuando los rebeldes lanzaron cohetes contra una zona residencial de Taez.
Según la agencia de prensa de los rebeldes hutíes sabanews.net, las fuerzas progubernamentales efectuaron bombardeos de artillería contra áreas situadas al este de la ciudad.
Un cohete cayó sobre un mercado de qat, una droga euforizante muy consumida en el país, y mató a 40 personas, añadió la agencia.
Médicos Sin Fronteras (MSF) afirma que los centros de urgencias respaldados o administrados por la organización en la provincia de Taez recibieron 21 cadáveres y 76 heridos tras “combates intensos”.
Las fuerzas partidarias del presidente Abd Rabo Mansur Hadi lanzaron hace cuatro días una ofensiva para la reconquista del palacio presidencial y del cuartel general de la policía, situados en las afueras de la ciudad y en manos de los rebeldes.
Los insurgentes se habían declarado “favorables” a la nueva iniciativa de paz para Yemen anunciada por Kerry y que incluía un alto el fuego, pero la propuesta fue rechazada por el gobierno.
La guerra en este país comenzó cuando los hutíes, ayudados por las fuerzas partidarias del expresidente Ali Abdalá Saleh, entraron en Saná en septiembre de 2014, apoderándose de extensas zonas del territorio.
En marzo de 2015, Arabia Saudí se puso al frente de una coalición militar árabe para intentar repeler a los rebeldes. El conflicto ha causado más de 7.000 muertos y casi 37.000 heridos.