El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, seguirá siendo el productor ejecutivo del programa “Celebrity Apprentice” de la cadena NBC, cuando éste regrese tras dos años de ausencia, confirmó el jueves la emisión.
Una portavoz dijo a la AFP que Trump conservará el título de crédito de la producción cuando la serie regrese a las pantallas, el próximo año, con su decimoquinta temporada, que contará con el actor y político Arnold Schwarzenegger como anfitrión.
El nombre de Trump aparecerá en la pantalla después de Mark Burnett, creador de “The Apprentice”, y antes que el de Schwarzenegger, en esta temporada de ocho episodios producidos por MGM Televisión, informó el semanario Variety.
La portavoz no hizo comentarios sobre si el futuro jefe de Estado recibirá un ingreso por cada episodio, aunque Variety dijo que es probable que sea un número bajo de cinco cifras.
El anuncio llega en un momento en que Trump intenta desestimar las críticas que sobre que su vasto imperio de negocios plantea un conflicto de intereses sin precedentes a la presidencia entrante de Estados Unidos.
El magnate, de 70 años, ha prometido que la próxima semana establecerá un plan para dejar a un lado su “gran negocio”, aunque no reveló quien tomará las riendas de su multimillonario emporio mundial y de sus marcas de lujo.
Aunque no están obligados a hacerlo, algunos presidente anteriores han puesto sus inversiones en fideicomisos ciegos. Trump ha dicho desde que ganó las elecciones a principios de noviembre que sus abogados los consideran innecesario.
NBC cortó sus vínculos con Trump en junio de 2015, negándose a difundir el concurso de belleza Miss Estados Unidos y Miss Universo, de los cuales él y NBC eran copropietarios, debido a sus controvertidos comentarios sobre los inmigrantes mexicanos.
En “The Celebrity Apprentice”, una ramificación de “The Apprentice”, conocidas personalidades compiten para demostrar su pericia en los negocios y su espíritu emprendedor, al tiempo que sirve para recaudar fondos para acciones de caridad.
Una exconcursante de “The Apprentice” fue una de las varias mujeres que acusaron a Trump durante la campaña electoral de agresiones sexuales.
Trump rechazó todas las acusaciones de conducta sexual agresiva, aunque en un video difundido por el Washington Post, el ahora presidente electo aparece jactándose de poder agarrar a las mujeres por los genitales solo por ser famoso.