Unos diez grupos rebeldes en Siria anunciaron el lunes que suspendían cualquier discusión con miras a las negociaciones de paz previstas en Astana, en respuesta a las "violaciones" por el régimen sirio de la tregua en vigor desde hace cuatro días.
"Estas violaciones continúan. Los bandos rebeldes anuncian (…) la suspensión de cualquier discusión relacionada con las negociaciones de Astana", indicaron en un comunicado, refiriéndose a las negociaciones de paz que organizan en Kazajistán por una parte Rusia, aliada del régimen de Damasco y Turquía, que apoya a la rebelión.
Los insurgentes afirman haber "respetado el cese del fuego en todo el territorio sirio (…) pero el régimen y sus aliados no paran de disparar y realizaron importantes y frecuentes violaciones en especial en las regiones (rebeldes) de Wadi Barada y Guta oriental", ambas situadas en la provincia de Damasco.
"Pese a las repetidas peticiones a la parte garante del régimen (Rusia, ndlr), estas violaciones continúan, amenazando la vida de centenares de miles de personas", denuncia el comunicado.
Desde hace dos semanas, antes de la instauración de la tregua global por parte de Turquía y Rusia, que antecede las negociaciones de Astana, la aviación siria bombardea casi diariamente Wadi Barada, a 15 km de Damasco, donde se encuentran las principales fuentes de suministro de agua potable para los cuatro millones de habitantes de la capital y sus alrededores.