Un trabajador palestino de la ONU, acusado por Israel de ayudar al movimiento islamista Hamas, que gobierna en la Franja de Gaza, fue sentenciado a siete meses de cárcel este miércoles, informó su abogada a la AFP.
El arresto, en julio de 2016, de Wahid Borsh, un ingeniero empleado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), causó gran revuelo al salir a la luz pública unas semanas después.
Borsh fue declarado culpable por un tribunal de Beer-Sheva (sur) de haber "apoyado involuntariamente a una organización ilegal", refiriéndose a Hamas, que Israel considera una organización "terrorista", explicó su abogada, Lea Tsemel.
Wahid Borsh, un gazatí de 38 años en el momento de su arresto, aceptó declararse culpable a cambio de esta pena y debería salir de prisión el 12 de enero, según su abogada.
Las autoridades israelíes anunciaron a bombo y platillo sus sospechas contra Wahid Borsh, que coincidieron con la detención de otro trabajador humanitario palestino, viendo en ambos casos la prueba de una malversación sistemática de la ayuda internacional.
Hamas gobierna en solitario la Franja de Gaza, sometida a un bloqueo terrestre, aéreo y marítimo por parte de Israel, así como a un riguroso control de las personas y mercancías que cruzan sus fronteras.
Dos tercios de los dos millones de palestinos que viven en la Franja de Gaza, un estrecho territorio presa de una crónica crisis humanitaria, se benefician de ayuda extranjera, cuya llegada depende tanto de Israel como de Hamas.