El general Hosein Dehghan, ministro de Defensa de Irán, confirmó una prueba de misil y afirmó que esta no constituye una violación del acuerdo nuclear, pese a las acusaciones de Estados Unidos.
"Esta acción no está en contradicción con el acuerdo nuclear ni con la resolución 2231" de la ONU que lo ratificó, declaró Dehghan, añadiendo que la prueba se enmarca dentro de "la continuación del programa defensivo" de Irán, informó la agencia Isna.
La resolución 2231 "pide a Irán que no lleve a cabo ninguna actividad vinculada a misiles balísticos capaces de transportar una cabeza nuclear".
Irán siempre afirmó que sus misiles no están concebidos para llevar armas nucleares.
"Tenemos un programa para producir equipamientos defensivos en el marco de nuestros intereses nacionales y nadie puede influenciar nuestra decisión", agregó.
La nueva embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, había declarado el martes que el ensayo del domingo de un misil balístico de mediano alcance era "absolutamente inaceptable".
"Podemos confirmar que Irán realizó un ensayo de misiles de medio alcance el domingo 29 de enero. Es absolutamente inaceptable", señaló la diplomática a la prensa tras una sesión a puertas cerradas del Consejo de Seguridad de la ONU.
Haley fustigó la afirmación de Irán de que este ensayo no viola las resoluciones de la ONU porque los misiles probados tienen únicamente fines de defensa y no están diseñados para transportar ojivas nucleares.
Teherán "sabe que no debe estar haciendo pruebas de misiles balísticos", dijo Haley. El misil lanzado el domingo es capaz de llevar una carga útil de 500 kilogramos y tenía un alcance de 300 kilómetros, dijo.
"Es más que suficiente para tener capacidad de transportar un arma nuclear", señaló Haley.