Bajo una lluvia ligera pero constante, el aparatoso accidente ocurrió cuando la última carroza de la escuela de samba Paraíso do Tuiuti (que volvía a la categoría reina por primera vez en 16 años) entraba a la pista de 700 metros del Sambódromo y se descontroló.
El enorme camión, en el que danzaban una quincena de bailarinas vestidas con motivos tropicales, chocó contra una tribuna vallada, dejando varios heridos en la pista y una señora con la pierna destrozada, constató una periodista de la AFP.
"Hay seis heridos, dos de ellos graves", dijo a la prensa el teniente coronel Morgado, del cuerpo de bomberos de Brasil.
Renato, uno de los testigos del accidente, que estaba sentado abajo de la grada afectada, explicó a la AFP que el camión "presionó contra la valla a las personas que estaban empujando el camión", que tenía problemas para avanzar.
A pesar de la conmoción dentro y fuera de la pista, donde varias personas lloraban asustadas, el desfile del Carnaval de Rio prosiguió con muchos de los ocupantes de la carroza visiblemente afectados, al tiempo que ambulancias, cuerpos de seguridad y bomberos llegaban a la "pasarela de la samba".
Con Ivete Sangalo, la vida continúa
En esos minutos de confusión, la organización del evento decidió retrasar el siguiente desfile de la escuela Grande Rio, en homenaje a la diva bahiana Ivete Sangalo, reina indiscutible del Carnaval de Salvador.
Pero, después de lamentar el accidente por megafonía, el conductor del evento gritó: "¡La vida tiene que continuar!".
Y los más de 3 mil miembros de esa escola iniciaron su desfile con la famosa cantante pop a la cabeza animando a las más de 70 mil personas del Sambódromo como si nada hubiera pasado.
Tras la tragedia, la samba siguió batiendo en la pasarela con desfiles que se prolongarán hasta la salida del sol para elegir a la campeona del Carnaval, junto a los seis desfiles restantes del lunes.