Tras la muerte de un ciudadano chino a manos de la policía en París, seguida de enfrentamientos ante una comisaría de la capital, China pidió a Francia que proteja "la seguridad y los derechos" de sus connacionales.
En un encuentro con la prensa, la portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Hua Chunying, indicó que Pekín había protestado ante las autoridades francesas y "exigido" que Francia "aclarara el caso".
El domingo, durante una intervención policial por una "disputa familiar" en una vivienda del noreste de París, "desde la apertura de la puerta" un hombre se precipitó para agredir a uno de los policías, hiriéndolo con arma blanca, explicó a la AFP una fuente policial.
Uno de sus colegas abrió entonces fuego para protegerlo, hiriendo mortalmente al agresor, añadió.
La familia del difunto cuestiona esta versión, dijo a la AFP su abogado, Calvin Job. Shaoyo Liu, que se hallaba con sus cuatro hijos, de 15 a 21 años, estaba cortando "pescado con tijeras" y "no golpeó (…) ni se precipitó" sobre los policías, que "dispararon sin previo aviso", afirma el abogado.
"Se cumplen las condiciones de un error de la policía", añadió Job.
La seguridad de los ciudadanos chinos es "una prioridad para las autoridades francesas", respondió por su parte el ministro de Exteriores francés, Jean-Marc Ayrault, precisando que había una investigación en curso.