La exvicepresidenta Roxana Baldetti aceptó hoy ser extraditada a Estados Unidos, país que la requiere por señalamientos de narcotráfico. Sin embargo, negó haber cometido algún delito de este tipo.
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"Soy inocente. Estoy dispuesta a dar la cara en Estados Unidos", expresó la exfuncionaria ante el Tribunal Quinto Penal, quien conoce el proceso.
Baldetti compareció por medio de videoconferencia desde la cárcel para mujeres Santa Teresa, en donde guarda prisión preventiva por estar ligada a proceso en al menos tres casos de corrupción.
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Además de negar las acusaciones que le hace el país norteamericano, dijo no ser culpable de los hechos que se le atribuyen en Guatemala.
De acuerdo con la sindicada, “esta no es más que una persecución de poderes oscuros” en su contra. Pues aseguró que lleva más de 20 años de hacer política en el país y que en esa carrera “seguramente ha dejado muchos enemigos en el camino”.
En la diligencia, su abogado defensor pidió que la ex vicemandataria "sea extraditada inmediatamente" a Estados Unidos.
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La guatemalteca es requerida por la Corte Distrital de Columbia, Estados Unidos. Fue acusada en febrero de este año por conspirar para distribuir cinco o más kilogramos de cocaína con la intención y conocimiento de que la droga sería importada de manera ilegal a ese país.
Señalamientos al embajador
Baldetti dijo que el 8 de mayo de 2015 renunció al cargo de Vicepresidenta, y que un día después el embajador de Estados Unidos en el país, Todd Robinson, aseguró que la iban a extraditar.
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“Dijo que yo tenía señalamientos, que había lavado dinero en Guatemala y Estados Unidos y que mi extradición era inminente”, expresó.
A su criterio, como las autoridades estadounidenses “no lograron por esa vía la extradición”, “intentaron por otro lado” y recurrieron a señalarla por “probable ayuda al narcotráfico”.
