Esa fue la realidad de un hombre chino hasta que los médicos retiraron casi 76 centímetros de su inflamado intestino grueso, que pesaba 13 kilos y estaba lleno de heces que se habían almacenado allí desde su nacimiento.
La revista Inverse reportó que el hombre, cuya identidad no ha sido revelad, fue diagnosticado con la enfermedad de Hirschsprung, una condición congénita causada por la desaparición de las células nerviosas en el intestino, lo que provoca problemas de movimiento.
En un tracto digestivo saludable, los alimentos y los residuos se mueven a través de los intestinos por el peristaltismo, o contracciones musculares involuntarias.
Pero en una persona que padece la enfermedad de Hirschsprung, el peristaltismo se detiene en las partes afectadas del intestino grueso, también conocido como colon.
Los desechos permanecen ahí, provocando que el órgano se hinche y, si se deja el tiempo suficiente, puede convertirse en un “megacolon”. Si el colon se perfora, o se rasga, la liberación de bacterias podría conducir al shock o a la sepsis, ambos potencialmente mortales. Así que esta cirugía pudo haber salvado la vida de este sujeto.
La enfermedad de Hirschsprung se observa típicamente en los recién nacidos y se diagnostica cuando no tienen un movimiento intestinal dentro de las 48 horas posteriores al nacimiento.
Es un padecimiento raro, que le ocurre a aproximadamente uno de cada 5,000 recién nacidos, y puede tratarse quirúrgicamente mediante la extirpación de la parte del colon que no tiene células nerviosas. Aunque no es tan frecuente, los niños de mayor edad también pueden ser diagnosticados con la enfermedad después de mostrar síntomas como un vientre inflamado, estreñimiento crónico y desnutrición.
Hirschsprung es más común en hombres y en niños con síndrome de Down y otros defectos congénitos.
Pero este pobre hombre, que hace mucho dejó de ser un niño, llegó al hospital en muy mal estado: estaba débil, apenas podía hablar, se quejaba del dolor y tenía dificultad para respirar. Según los médicos, su abdomen estaba tan distendido que parecía tener un embarazo de nueve meses.
El hombre le dijo a los médicos que había sufrido de estreñimiento toda su vida, y que sólo había encontrado un breve alivio en los laxantes. Cualquier tipo de laxante, los que incrementan el volumen, los de solución salina, los hiperosmóticos, no funcionarán correctamente si tus intestinos tampoco lo hacen.
Sin embargo, sus padres nunca consideraron que sus problemas fueran lo suficientemente graves como para llevarlo al médico.