Miguel Gálvez, el juez que envió a prisión al expresidente Otto Pérez en 2015 y a decenas de corruptos y narcotraficantes, compareció solo y sin algún abogado ante la Junta Disciplinaria Judicial. Fue inusual. El juez estuvo en el banquillo de los acusados, cuando lo habitual es que escuche a los sindicados. Esta vez se defendió de la acusación que hizo un reo de un caso de despojo de tierras por supuestos retrasos en su proceso.
La junta fue presidida por Gabriel García Luna y lo auxiliaron los vocales Esmeralda Orozco y Cecilia Paiz. El abogado y señalado René Danilo Mejía Mejía siguió el proceso por videoconferencia desde la cárcel militar Mariscal Zavala, donde permanece desde el 6 de abril de 2016, cuando fue detenido por integrar una estructura liderada por Walter Obdulio Mendoza Matta que, mediante amenazas, violencia y engaños, despojó al menos 28 fincas de campesinos de Petén entre 2008 y 2011.
El juez utilizó 25 minutos para defenderse del retraso en conocer el proceso judicial de Mejía. El “as” bajo la manga fue que leyó un documento donde está la agenda del Juzgado de Mayor Riesgo B.
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Piden que sea suspendido
El supervisor Erick Álvarez explicó, en sus conclusiones, que se debe sancionar al juez Gálvez “a 20 días de suspensión laboral sin goce de salario”. La petición se hizo a pesar de que el sindicado Mejía desestimó el señalamiento al juez al enterarse que se acercan sus audiencias.
Los representantes de la Asociación de Jueces y Magistrados, presidida por Marlon López, acompañaron al juez Gálvez y estuvieron atentos a la audiencia. Además había un representante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y decenas de periodistas.
Gálvez evitó opinar al respecto aunque recordó que la audiencia intermedia de un fraude en La Antigua Guatemala, donde hay 28 sindicados, entre ellos el exalcalde Adolfo Vivar, se detuvo.
La junta leerá su resolución a las 15 horas.