“Avión Fokker 50 ha sido secuestrado por un comando, hay un terrorista en la cabina del avión", fue la alerta enviada a las autoridades por medio de un radio transmisor. Inmediatamente las fuerzas de seguridad se movilizaron al lugar e iniciaron a acordonar el área.
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Así se inició el simulacro este jueves, el cual se realizó en las instalaciones de la Fuerza Aérea Guatemalteca (FAG) con el objetivo de medir la reacción del país al atender un ataque terrorista.
La actividad estuvo a cargo de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), que informó que la actividad se llevaría a cabo de la manera “más real posible”.
Se tuvo previsto que kaibiles del Ejército de Guatemala enfrentaran al grupo terrorista que supuestamente se apoderó de un avión con capacidad para 52 pasajeros.
También, las autoridades del Ejecutivo ofrecieron conferencias de prensa para informar sobre la “emergencia”.
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En uno de los tensos momentos se le notificó al presidente Jimmy Morales acerca de esta situación y él ordenó que no se negociaría con los terroristas.
Rehenes
Los "terroristas", supuestamente miembros de la agrupación denominada "Nuevo Orden Mundial", mantuvieron a varias personas retenidas dentro de la aeronave y exigieron la liberación de un líder narcotraficante.
Realizaron varias peticiones a las autoridades con relación a que se les entregaran alimentos y agua.
Luego de que se les dio agua, los atacantes accedieron a liberar a una pasajera que presentaba crisis nerviosa.
