El presidente estadounidense, Donald Trump, se mostró este lunes abierto a un posible acuerdo político con los talibanes, al anunciar la estrategia de su gobierno en Afganistán, una guerra de 16 años.
"Pero nadie sabe si o cuándo ocurrirá eso", añadió el mandatario, antes de indicar que "Estados Unidos mantendrá su apoyo al gobierno afgano y al ejército, mientras luchan contra los talibanes".
El secretario de Estado, Rex Tillerson, dijo que la decisión de Trump de presionar a Pakistán e intensificar las operaciones militares en Afganistán podría ayudar a los diplomáticos estadounidense a avanzar en la construcción de una solución política.
"Nuestra nueva estrategia rompe con enfoques anteriores que establecieron plazos artificiales", señaló Tillerson en una declaración tras la intervención del mandatario.
"Estamos dejando claro a los talibanes que no ganarán en el campo de batalla. Los talibanes tienen un camino hacia la paz y la legitimidad política a través de un acuerdo político negociado para terminar la guerra", expresó.
Tillerson prometió que su país apoyará conversaciones entre el gobierno afgano y los talibanes "sin precondiciones".
"Pedimos a la comunidad internacional, especialmente a los vecinos de Afganistán, que se nos unan para apoyar el proceso de paz afgano".